martes, 28 de octubre de 2008

Hoy la lluvia nos ha mojado los bajos del pantalón, tenemos la planta del pie empapada, hemos intentado esquivar el charco grande y en el intento hemos caído en uno más pequeño pero más profundo. Además el suelo lleno de esa alfombra roja que nos deja el otoño disimula los lagos formados y las arenas movedizas a las cuáles caemos como trampas de cazador furtivo. Encima nos hemos acordado de que el paraguas lo tenemos roto y que la última vez pensamos en ir a arreglarlo pero no lo hicimos, porque nunca tenemos tiempo, y el tiempo se para porque nuestro reloj no es de agua y las manecillas se quedan inmóviles, pasivas al tiempo climatológico,esperando que las gotas penetren dentro de la esfera emborronando los números, los cuáles en esta época de crisis dan tanto de que hablar...y de qué hablamos hoy...de la lluvia.



Café con leche calentito y con dos de azúcar.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Los paraguas se llevan a arreglar? ¿Hi ha tendes especialitzades en eixe tipus d'enginyeria?

amP* dijo...

me mola mucho lo que escribes santi :)